Seguridad

Seguridad económica, seguridad laboral… la seguridad de que la persona que amas con toda tu alma sea la persona que realmente va a estar ahí cuando más la necesites y cuando llegues a casa tarde de noche cansada de tanto trabajar y que se levante de su camita caliente y te haga un caldito de verduras y luego unos masajitos… ya la tengo, pero la seguridad de que cada mes voy a poder ser capaz de pagar mis cuentas no la tengo.

Eso me lleva a pensar que tal vez las decisiones que he tomado a lo largo de mi vida han sido malas, pero si analizo ello más profundamente creo que algunas de mis decisiones han sido buenas porque no puedo dejar que las personas pasen por encima de mí; por otro lado tampoco puedo dejar que hayan personas que tomen decisiones por mí que yo se que no van a estar bien…

¿Qué es lo que puedo hacer entonces?... tomar las riendas del asunto y seguir adelante, debo hacerlo!!... por qué debo?? Porque hay mucho en juego!!!.... mi vida, mi carrera, mi futuro, el futuro de mis empleados, el futuro de mis socios, la marca nueva que sólo tiene una temporada, todo lo que ya hemos invertido… todo lo que engloba eso… es demasiada responsabilidad y quiero creer nuevamente que no me va a ir mal o al menos peor de lo que me va ahora no puede irme!!!

Desde el día que renuncié a dar las clases he tenido trabas, que me dicen que regrese… pero no lo voy a hacer porque necesito creer y quiero creer que no puede haber tanta gente tan malintencionada, tan poco profesional y tan menospreciativa con sus empleados, que no respete a la gente que les hace tanto bien y que los salva de tantas cosas… ahora estoy tranquila con ello porque se que hice lo que pude y di el 120% por ellos, a cambio de qué?, de una patada trapera en el culo… y de quedar en la quiebra absoluta por no dedicarme a mí misma, ni en mi negocio cuando ESA DEBIÓ SER MI PRIORIDAD!!

Me doy cuenta recién hoy que lamentándome no logro nada, que ésta mala racha sólo ha sido provocada por la inercia generada por la depresión colectiva que se vive en la empresa que he formado hace poco y que esa depresión colectiva no se va a ir si es que alguien no hace algo por curarla… no quiero que se quede, no quiero que se cierre la empresa, no quiero que se de vuelta a la página sin saber que hice todo lo que pude haber hecho por mí y por ellos que confiaron en mí para una empresa naciente, no me quiero dar por vencida!!!... hasta no lo he hecho y espero que ellos tampoco lo hagan!

Quiero estar segura de que mis posts serán más pronto de lo que imagino y cuando lo haga empiece a escribir cosas bonitas que me pasen y no ésta sarta de opiniones depresivas que estoy teniendo, quiero hacerlo porque me relaja escribir aquí... y porque es una manera de darme cuenta que lo que me tiene loca ultimamente es el maldito dinero, no el trabajo porque me encanta lo que hago y me gustaría hacer mucho más, me gusta tanto como escribir... pero quisiera que sea remunerado al menos mi trabajo... porque no lo es!! y no vivo del aire y eso también me stresa, se me hace difícil pensar que alguien puede vivir trabajando sin un sueldo... y sin tener claro una fortuna propia... eso se me hace muy difícil... quiero creer que ésto va a cambiar, porque quiero hacer que ésto cambie... y no por otra razón más que mi satisfacción personal y por mi seguridad futura.

Transporte...

Ésa escasa y caótica herramienta con la que todos los días tenemos que luchar ya que cada calle que transitamos y cada arteria de nuestra bella y variopinta ciudad anda cerrada y sin aparente control, por lo visto cambian los desvíos y cierran y abren las rutas alternas como les da la gana, eso me pasó hace no mucho(hace tres días para ser más específicos). Andaba con una amiga saliendo del trabajo y nos dirigíamos al paradero más cercano que queda como a 7 cuadras normal caminar pero hay que salir y caminar como dos cuadras extras para llegar al frente y seguir caminando… así que empezamos nuestra travesía en búsqueda de nuestro tan añorado regreso a casa, fue así como sorteamos obreros de construcción gritando, caterpillars avanzando y retrocediendo por doquier, mototaxistas que querían hacer su negocio llevando gente, raspadilleros y demás personajes con los que uno sólo se puede encontrar si es que está dentro de una construcción tan larga y sobre todo si se trata de una en Lima Norte…  Luego de mucho sufrir y caminar las 7 cuadras que con el reverberante sol ya parecían alrededor de 20, llegamos a nuestro ansiado paradero y lo más gracioso es que cuando hemos llegado habían decidido desviar el tráfico y ahora los buses y demás transportes no pasaban por allá sino que ahora no teníamos idea de por dónde pasaban, decidimos entonces preguntar… y debíamos caminar 20 cuadras hacia el siguiente paradero o 12 cuadras de regreso hacia el otro… decidimos regresar glamorosas como siempre… en… mototaxi… la sorpresa es que no paraban, ninguno paraba y cuando logramos parar uno se trepó en él una señora como de 60 años que nos ganó el transporte por puesta de mano.

Llegamos al fin al frente de donde salimos y encontramos al fin alguien que nos llevara, un viejito mototaxista, nos subimos a su vehículo y cuando nos dimos cuenta el viejo de miércoles nos dijo que ya habíamos llegado a nuestro destino y que nos bajáramos cuando no nos había acercado ni tres cuadras… y nos dijo que sólo llegaba hasta ahí porque no estaba permitido que pasaran a la avenida… ni siquiera tuvo la decencia de advertirnos antes de subirnos a su taxi, terminamos caminando y ya a esa hora empezaban a salir los amigos de lo ajeno a ver quién sería su siguiente víctima… ya llegando a nuestro destino luego de caminar unas 5 cuadras más pasando una vez más entre caterpillars, grúas de construcción y ladrones, llegamos al paradero y mi amiga pudo irse tranquila porque su bus pasó rápido, pero me quedé yo solita y no pasaba ninguno ni siquiera que me acercara un poco… hasta después de media hora en la que ya se me habían agotado los rezos y ya estaba encomendada a todos los santos porque me moría de miedo… y cuando al fin pasa uno que me deja cerca claro! Relativamente cerca, pero desde ahí ya podía tomar una conexión, hacia mi oficina… y claro después de alrededor de 4 horas de caminata bajo el sol, con nubes de tierra y rodeada de pirañas… llegué al fin a mi oficina a seguir trabajando por unas cuantas horitas más… cuando lo que en verdad quería hacer era bañarme y deshacerme de ese olor a tierra y monóxido acumulado en ropa y en mi cabello.

Sólo espero que eso termine pronto aunque sé que aún tengo mucho tiempo de ello… pero queda la esperanza de que se pase rápido, aunque no tan rápido como el año pasado, que para mí fue uno de los más rápidos que he tenido.